
Prevención del VIH-SIDA
El Programa Municipal de Sida durante el período de pandemia sostiene la atención de la consejería en VIH (consultas y testeos) en Moreno 960 1er piso. Pedir turno al 4802189
VIH ¿Qué es?
El Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH) es un retrovirus que ataca al sistema inmunitario de las personas. Una vez debilitado por el VIH, el sistema de defensas permite la aparición de enfermedades. Esta etapa avanzada de la infección por VIH es la que se denomina Síndrome de Inmuno Deficiencia Adquirida (SIDA). Esto quiere decir que el SIDA es un conjunto de síntomas (síndrome) que aparecen por una insuficiencia del sistema inmune (inmunodeficiencia) causada por un virus que se transmite de persona a persona.
Por eso, no toda persona con VIH tiene sida, pero sí toda persona que presenta un cuadro de sida, tiene VIH. Una persona con VIH no necesariamente desarrolla síntomas o enfermedades. Sin embargo, sí puede transmitirlo.
El VIH no tiene síntomas. Por lo tanto, la única manera de saber si alguien contrajo el virus es a través de un test. En Argentina, se calcula que 1 de cada 4 personas con VIH aún no sabe.
El análisis de VIH es voluntario, confidencial y no requiere orden médica. En todos los hospitales públicos y centros de salud es gratuito. También podés hacerte el test en diferentes organizaciones de la ciudad
Período ventana
Una vez producida la infección por VIH, los anticuerpos tardan entre 3 y 4 semanas en ser detectados. Es decir que durante este tiempo, llamado “período ventana”, los análisis pueden resultar negativos aunque la persona tenga el virus. Es por eso que cuando hubo una situación de riesgo, si el análisis se hizo durante el mes siguiente y el resultado fue negativo, se recomienda repetirlo.
Un resultado positivo significa:
- Que se encuentran anticuerpos del VIH en la sangre. Es decir, que la persona tiene VIH. No significa que tenga sida.
- Que esa persona puede transmitir el VIH a otra persona.
- Que debe usar preservativo en las relaciones sexuales para no transmitir el VIH y evitar el riesgo de re-infección, es decir, que otra cepa diferente del VIH ingrese en su organismo.
- Que, en caso de que una persona quede embarazada, debe tomar los recaudos necesarios para evitar la transmisión al bebé.
Vías de transmisión
El VIH se encuentra en la sangre, el líquido preseminal, el semen, los fluidos vaginales y la leche materna. El VIH se transmite a través del contacto de estos fluidos con las mucosas o el torrente sanguíneo de otra persona.
Las vías de transmisión comprobadas son pocas y bien definidas:
- Vía sexual: por relaciones sexuales vaginales, anales u orales, entre personas del mismo o diferente sexo sin protección. El 90% de las transmisiones de VIH se producen por vía sexual.
- Vía sanguínea: por contacto con sangre al compartir jeringas o canutos para el uso de drogas o cualquier otro elemento cortante o punzante.
- Vía perinatal o vertical: de madre a hijo durante el embarazo, el parto y la lactancia. Es la principal vía de transmisión del VIH en niños.
Besar, abrazar, dar la mano, jugar, trabajar o estudiar, compartir duchas o piscinas e intercambiar ropa con personas con VIH NO transmite el virus.
¿El VIH tiene cura?
No existe una cura definitiva, por lo que el VIH se ha convertido en una enfermedad crónica. Con la atención médica adecuada y tratamiento el VIH se puede controlar.
Los medicamentos contra el VIH impiden que el virus se reproduzca (se replique), lo que reduce la carga viral, reduciendo la posibilidad de desarrollar enfermedades y el riesgo de transmisión.
El hecho de tratar la enfermedad lo antes posible y la gran evolución que han experimentado los fármacos para el VIH, ha hecho que la esperanza de vida de quienes viven con el virus sea cada vez mayor.
Prevención del VIH
- Vía sexual: Usar el preservativo de manera correcta, durante toda la relación sexual ya sea vaginal, anal u oral. Cualquier otro método anticonceptivo no previene el VIH. En relaciones sexuales orales vaginales o anales o relaciones sexuales entre mujeres, usar campo de latex.
- Vía sanguínea: Evitar el contacto con sangre. Para eso, es necesario no intercambiar o compartir agujas ni jeringas. En el caso de que se consuman drogas de manera inyectable, usar una nueva jeringa cada vez. También se sugiere controlar que todo procedimiento que incluya algún corte o punción (tatuajes, piercings, etc.) sea realizado con material descartable o esterilizado y utilizar guantes de latex.
- Vía perinatal o vertical: se previene controlando los embarazos. Se recomienda que toda mujer embarazada se realice el análisis de VIH durante el primer trimestre. Es recomendable que la pareja también se realice el test, y en el caso que sea positivo usen preservativo para evitar la infección de la persona embarazada y su posterior transmisión al bebé.
En la Secretaría Salud Pública el 100% de mujeres embarazadas y el 42% de sus parejas se realizan pruebas de VIH. En los últimos 4 años no ha habido transmisiones de madre a hijo.
Franquicia de transporte
Solicitar Alta o renovación de Franquicia de Transporte para personas con VIH.
Preguntas frecuentes sobre VIH
Se estima que las posibilidades de transmisión por relaciones sexuales de hombre a mujer es mayor que la de mujer a hombre. El área genital femenina expuesta es más amplia que la del hombre y el semen puede permanecer hasta 72 hs en la vagina. Además como hay más hombres infectados, es más alta la probabilidad de que la mujer tenga una pareja infectada.
No, ni los besos sociales (labios con piel) ni los besos profundos (boca con boca) se ha demostrado que puedan transmitir la infección.
Sí, es seguro. El látex bloquea el paso del virus. La eficacia puede fallar si no se lo usa o se lo usa mal en cada acto sexual. La mayoría de los estudios realizados para comprobar la eficacia del preservativo provienen de experiencias realizadas en laboratorios, en vista de que no sería ético realizarlos con seres humanos. Además, se realizaron estudios de seguimiento en parejas (donde uno de los miembros estaba infectado y el otro no) que lo usaban versus parejas que no lo usaban. No se observaron casos en aquellas que lo usaban y sí se observaron en las que no lo usaban. El riesgo se incrementaba en un 5% anual en estas últimas. Esto avala la seguridad del preservativo como método de prevención eficaz.
Existen muchas variables o factores, como por ejemplo el estado inmunitario, la carga viral, el tipo de contacto; y en los estudios realizados no se pueden mantener unas condiciones de "laboratorio" que ofrecerían unas óptimas garantías de investigación. De todas maneras se pueden hacer las siguientes aproximaciones: Para el sexo oral el riesgo es bajo, pero no es nulo. La relación sexual con penetración anal tiene un riesgo para el receptor sin VIH de un 3% de infección desde un hombre con VIH (Es la relación sexual de mayor riesgo). El hombre sin VIH que penetra sin preservativos a un hombre o mujer con VIH, tiene un riesgo de adquirir el virus de alrededor de un 2%. En las relaciones vaginales, el riesgo es de 1% para la mujer receptora del semen de un hombre con VIH, y el riesgo es de un 0,7% para el hombre, si la mujer estuviera infectada.
El riesgo es bajo, pero existe. El sexo oral involucra riesgo de transmisión del VIH siempre que no exista una barrera (preservativos o campos de látex) que eviten el contacto del semen de un hombre con VIH o los fluidos vaginales de una mujer con VIH, con la boca de otro hombre u otra mujer.
Esta situación ocurre cuando una persona sufre un pinchazo accidental. El VIH tiene un riesgo de viabilidad muy limitado una vez que está fuera del organismo, ya que necesita una célula viva para replicarse y dependerá de las condiciones en que esté la sangre. El virus tendría posibilidad de infectar durante menos de 6 horas, ya que al secarse o coagularse pierde viabilidad. Los factores implicados y la ansiedad en juego en estos accidentes hacen siempre recomendable una consulta especializada, a la brevedad posible.
Hoy sabemos, a través de estudios de seguimiento, que en general no, pero esto siempre que se halla alcanzado la carga viral de VIH no detectable en sangre y la persona con VIH tome regularmente su medicación. En todo caso es recomendable que las personas con VIH hablen de este tema con su médico acerca de estos casos. Hay que recordar que si el tratamiento se suspende el virus reaparece en los líquidos corporales y puede ser transmitido a otras personas.
Indudablemente. Las personas infectadas pueden llevar una vida normal.
Sí. Este riesgo es bajo en relación a otras prácticas sexuales. En las secreciones vaginales de una mujer con VIH el virus está presente, y si en la práctica del sexo oral estos líquidos entran en contacto con la boca de otra mujer, el VIH podría pasar a ella. Se recomienda la utilización de un campo de látex como método de barrera para evitar este riesgo.
Existen consultas de personas que realizaron sexo oral sin eyaculación de la pareja, pero notaron un "líquido" diferente al semen. Este líquido se llama líquido preseminal, es de tipo acusoso y se considera que puede contener las mismas concentraciones de VIH que el semen.
A los donantes de sangre se les entrega en primer lugar un cuestionario, en el que se deberían autoexcluír todas aquellas personas que hubieran tenido un comportamiento de riesgo para la infección por VIH. Todos los bancos de sangre deben realizar igualmente por ley la prueba de VIH en forma rutinaria, previo a cada transfusión.
El virus realiza una diseminación en sangre para posteriormente acantonarse en unos santuarios o reservorios entre los que se destacan el Sistema Nervioso Central, los Ganglios Linfáticos y el Semen. De una manera silenciosa para la persona infectada (asintomática), va invadiendo y destruyendo las células que coloniza. Tiene preferencia por unas células defensivas llamadas linfocitos CD4, que son una parte relevante del Sistema Inmunológico.
El VIH tiene especial capacidad para infectar las células del Sistema Inmunitario llamadas linfocitos. Estas células se hallan presentes sobre todo en la sangre y en los ganglios linfáticos. Una vez que se une a una de estas células (etapa 1 del ciclo replicativo) el virus ingresa su material genético, o genoma, de tipo ARN, al citoplasma de la misma. A continuación, y a través de una enzima llamada transcriptasa reversa, dicho material es copiado de su versión ARN en una versión ADN, que es la forma en que está codificado el material genético en el ser humano (etapa 2 del ciclo replicativo). Por esta característica de autocopiado de su genoma de la forma ARN al ADN, es que se designa a este virus como "retrovirus". La versión ADN del VIH ingresa luego al núcleo de la célula invadida y se incorpora al ADN celular, desde donde va a comandar la replicación del virus (etapa 3). En la etapa final de este ciclo replicativo, el virus es "recortado" hasta su formato original por otra enzima llamada proteasa (etapa4). El nuevo virus generado en la célula brota entonces hacia el exterior de la misma, entra en la circulación sanguínea y linfática, e infecta a otras células. Las dos enzimas nombradas, transcriptasa reversa y proteasa, son estructuras muy estudiadas y sobre ellas actúan, inhibiéndolas, las medicaciones antiretrovirales conocidas como "cócteles". Los linfocitos infectados por el VIH sufren progresivos deterioros en su funcionamiento, que los llevan a la muerte celular.
Es un estudio que permite conocer la cantidad de virus presente en la sangre. Es un indicador muy confiable del riesgo de progresión de la enfermedad. Cuanto más alta sea la carga viral, es más probable que las defensas bajen y puedan aparecer complicaciones del VIH. La cantidad se expresa en copias por mililitro de sangre (copias/ml). Una persona con un cierto control de la enfermedad tendrá entre 5.000 y 10.000 copias/ml; en los estadíos avanzados pueden existir cargas virales mayores de 500.000 copias/ml. Los tratamientos antirretrovirales suelen llevar la carga viral a niveles "indetectables", llamados así porque la técnica de laboratorio no los puede detectar. Al momento actual este límite es de 34 copias/ml.